lunes, 9 de enero de 2012

Porque no hay mejor cosa que ser libre en aquel espacio llamado felicidad.

Porque principalmente es verdad eso que dicen de que si tú no te quieres a ti mismo nadie lo hará. Porque alguien un día me enseñó esto. Y quizá solo no puedas con todo, no aprendas a valorarte ni a decirte algo tan simple como "joder que me lo merezco", pero no estás solo, en el fondo nadie lo está. Y son esos amigos los que te alegran, los que te ayudan a valorarte, a quererte porque a veces contar con alguien no está tan mal. Y sí, habla aquella que dependía de él, que lo amaba, que lo necesitaba como el comer, que se humillaba con tal de ver su sonrisa reflejada en la mía suya propia. Porque cuando te das cuenta de todo, de lo que te mereces, de lo que vales, de lo que te quieren, de que no estás solo, de que no merece la pena humillarte por algo tan inútil. Cuando porfín algo hace "chip" en tu interior, cuando te dicen todo, cuando te hacen darte cuenta de que eres mejor que cualquier cosa que te haga daño, entonces solo entonces eres capaz de sonreír sin que su sonrisa se tenga que reflejar en la tuya propia.
Y a veces es mejor sonreír, dejar de atarte a alguien, y darte cuenta de que ni estás sola ni vacía sin él, que seguir amargada por alguien que no malgasta ni un segundo en pensar en ti. Es como aquella película que ví; cualquier forma de felicidad es mejor que estar deprimido por alguien. Porque la libertad y valorar esa misma que es tuya, y solo tuya es la que te saca alguna que otra sonrisa al cabo del día.

Gracias queridísimo Javier por hacerme ver que la sonrisas valen oro, y más las tuyas propias.

1 comentario:

  1. *.*
    Muchísimas gracias premah.
    Por fin puedo felicitarte por el blog.
    Quiero que sepas, que estoy muy orgulloso de ti.
    =)

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